«Hoy la democracia mexicana está en riesgo porque los mexicanos no tienen la libertad para decidir su voto», señaló Xóchitl Gálvez

La candidata presidencial Xóchitl Gálvez advirtió que «la democracia mexicana está en riesgo» ante la cifra de asesinatos relacionados con las elecciones, al contabilizar 44 homicidios de candidatos, políticos, funcionarios y sus familiares en el actual proceso.

«Con estos niveles de violencia, queda demostrado que este Gobierno ha fracasado en su obligación de garantizar la vida y la seguridad de las familias mexicanas. Hay que decirlo claramente: hoy la democracia mexicana está en riesgo porque los mexicanos no tienen la libertad para decidir su voto», expresó en una rueda de prensa.

La candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México citó un aumento del 163% en las solicitudes de protección de candidatos federales entre 2018, la última elección presidencial, y este 2024.

La organización Data Cívica reportó la semana pasada el asesinato de al menos 10 candidatos o aspirantes en el primer bimestre del año, mientras que, tan solo en febrero, hubo 36 homicidios de violencia política al considerar también a funcionarios públicos y familiares de los políticos.

«Hoy quiero mandar mi más sentido pésame a los familiares de los candidatos que tristemente han sido víctimas del crimen organizado. Ni ellos ni nadie merecían morir», comentó Gálvez.

Xóchitl señala al presidente

La opositora responsabilizó al presidente mexicano, de la violencia política.

«Presidente, no puede usted seguir negando la realidad. Enfrente con valor su responsabilidad y no sea cobarde, su obligación es darle paz a las regiones de México que hoy están controladas por la delincuencia organizada», manifestó.

Gálvez tachó de «vergonzoso» que Claudia Sheinbaum, «no exprese el pésame a los familiares de los candidatos asesinados, ni siquiera a los de su propio partido».

Finalmente, solicitó al Instituto Nacional Electoral (INE) y al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tomar medidas para proteger a los candidatos, como elaborar un mapa de riesgo y un protocolo «apegado a la realidad».